El caso de Michael Brown abrirá otra vez el debate hasta dónde los policías podrán actuar como autoridad. Sería injusto con la sociedad en general que la comunidad afroamericana tuviera más derechos que los blancos y los hispanos.
En la Florida proliferan las clínicas del dolor donde los médicos recetan opiáceos como la Codeína, el Vicodín o el Oxicontín, como dar una aspirina. El FBI sigue continuamente pistas de traficantes que compran las pastillas a los pacientes para revenderlas en el mercado negro.
No me preocupan las advertencias de que con tanto reportero ciudadano el oficio de periodista pudiese desaparecer, porque lo que garantiza la credibilidad es la veracidad. Lo preocupante aquí es el descontrol, la inmoralidad y la ceguera de quienes dan por hecho que la Internet es la última palabra.
Cabizbajo y decepcionado, el presidente Barack Obama dijo entender el mensaje del pueblo, supongo que se refirió al castigo que los políticos reciben en las urnas, no obstante, se niega a creer que el voto fue en contra de su gestión.
Lo lamentable de la respuesta contundente de Israel es que las secuelas son muy malas. Cada vez que mueren niños y mujeres inocentes, aumenta ese rencor que ciega al pueblo palestino y a muchos los transforma en terroristas. Es un círculo vicioso perpetuo.