¿Imitaciones o fenómeno sociópata?

Imitaciones o fenómeno sociópata - Raúl Benoit

La repetición de actos violentos en escuelas y en hogares donde un desquiciado mata sin piedad, es un fenómeno criminal que sociólogos, siquiatras y antropólogos deberían comenzar a investigar.

Los últimos acontecimientos sucedieron en dos extremos del mundo: en Alemania un ex alumno de una escuela disparó contra 9 compañeros, 3 profesores y 3 personas más que se le cruzaron en su camino de huída; en Alabama, Estados Unidos, un hombre quemó a su madre y mató a 10 parientes y desconocidos.

Los rasgos se parecen. Quienes atacan en escuelas son en su mayoría adolescentes retraídos que han sufrido discriminación, pero ciertamente inteligentes y hasta buenos estudiantes. Los asesinos de su familia, por lo general, actúan amorosos en casa y tranquilos en la comunidad.

Un perfil común es que todos tienen acceso a pistolas, revólveres y/o fusiles.

Algunos defensores de la tenencia de armas de fuego dicen que éstas no son la causa de los arrebatos mortales de sus poseedores y afirman que el problema está en el corazón y en la cabeza de cada quien. Pero, es lógico que si no existieran las armas en el hogar les sería más difícil cometer un crimen.

En el ejercicio del oficio de reportero he visto casos atroces.

Hace un par de años estuve en un pueblo de Texas donde un hombre, practicando tiro al blanco en el patio de su casa, mató a un niño que estaba a más de 500 metros de distancia. Fue una coincidencia fatal. Pero, ¿a quién se le ocurre llegar del trabajo y disparar a una diana en el jardín sin cuidar de no lastimar a alguien en el vecindario?

En el mundo hay un debate entre los que exigen su derecho a defenderse y los que opinan que las armas son peligrosas y originan violencia. Para mi, las armas traen problemas tarde o temprano.

Otro cuestionamiento es la responsabilidad de los medios de comunicación. Aunque muchos defendemos la libertad de expresión y relatar los sucesos tal cual ocurren con el fin de que la gente reaccione, me pregunto ¿cuándo cruzamos la línea y nos convertimos en mensajeros del mal?

Inquietante es que las noticias transmitidas con tanta libertad, pudieran estar siendo usadas por gente enferma como si fuera una escuela del crimen.

También habría que investigar si el subconsciente de las últimas generaciones ha sido dañado por la violencia virtual de los video-juegos.

Los padres de hoy día se rindieron y no controlan a los hijos ante el comercio inaudito de juegos sangrientos donde los menores de edad (a quienes se les está formando su cerebro, emociones y percepción social) hacen el papel de asesinos matando policías y de malhechores robando bancos y asaltando personas.

Sea cual sea el origen de la repetición de estos crímenes múltiples, debemos preocuparnos por saber si tenemos un grado de responsabilidad como familia, como dirigentes y como periodistas.

Roguemos a Dios que lo que estamos presenciando no sea una imitación en vivo y en directo de lo que se ve en la televisión o que sea el surgimiento de un padecimiento sociopático que está dañando sigilosamente a la sociedad y del cual todavía no se tienen estudios médicos.

Raúl Benoit
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Raúl Benoit

Periodista y escritor colombiano de origen francés. Se ha destacado en televisión latinoamericana, como escritor de libros y columnista de periódicos del mundo.

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