Es importante advertirles a estos jóvenes que ambicionan la popularidad, el dinero y ser asediados por fanáticos y paparazzis, que la vida de una celebridad no es tan perfecta y con frecuencia es agobiante, solitaria y triste.
Convirtamos cada día en el comienzo de un nuevo año lleno de planes reales que cumpliremos porque estamos convencidos de ello y que no sean solo promesas al viento que se olvidan por la pereza o echándole la culpa a otros.
Cada fin de año, los papás y las mamás se enfrentan a un dilema de cómo satisfacer a sus hijos y explicarles que, a pesar de los difíciles tiempos, el Niño Dios o el Papá Noel o los Reyes Magos, siguen siendo generosos.
Chespirito se fue dejándonos varias lecciones de vida: una de éstas es cómo, de manera sencilla y sincera, se puede divertir a la gente sin morbosidad y vulgaridad. Otra es que, haciendo chistes blancos, también se puede alcanzar una alta sintonía.
No me preocupan las advertencias de que con tanto reportero ciudadano el oficio de periodista pudiese desaparecer, porque lo que garantiza la credibilidad es la veracidad. Lo preocupante aquí es el descontrol, la inmoralidad y la ceguera de quienes dan por hecho que la Internet es la última palabra.
Quien aprenda desde niño a gestionar para bien sus emociones será más feliz de adulto. Pueden capacitarnos en matemáticas, geografía, ciencias e historia, pero si no nos enseñan a amar, a complacer y complacernos, a compartir y a expresar las emociones, seremos adultos aburridos, antipáticos y llenos de amargura.
El chocolate alegra corazones, endulza la vida y es un buen amigo en los momentos tristes. No hay nada mejor que un beso achocolatado o un chocolate caliente en una tarde de tertulia para reconfortar el alma.
Todos tienen que saber, especialmente los jóvenes, que bailar con Molly es como danzar con el diablo en el infierno.
Nunca cuestionamos la diferencia entre Papá Noel (Santa Claus) y el niño Dios. Mientras algunos amigos esperaban al barba blanca, influenciados por la costumbre de los Estados Unidos, nosotros le teníamos fe al pesebre, los pastores y los Reyes Magos.
A la mañana siguiente investigué sobre los daños fisiológicos que produce la carne roja. Estudios aseguran que las personas que la comen moderadamente unas 3 veces por semana, intoxican el cuerpo obligando a los órganos a hacer un mayor esfuerzo.
Muchos hemos olvidando que la nochebuena celebra la llegada de Jesús a la tierra para esparcir amor y que las bendiciones son para los ricos, los pobres, los niños, los adultos y los viejitos.
La cacería de hombres millonarios en Miami se ha vuelto un deporte común. La frivolidad de cierta mujeres con fantasías desmedidas que llegan de Latinoamérica en busca de una pareja, es aberrante y demuestra una vez más que la sociedad actual perdió valores y sucumbió en el materialismo.