Falsedad revestida de patriotismo

La protagonista de esta burla se llama Sandra Torres, la encarnación misma de la vergüenza política, que para rematar el descaro e inmoralidad resolvió, en una falsedad revestida de patriotismo, trampear la Constitución Política, para lanzarse como candidata a la presidencia de Guatemala. Se divorció del actual presidente y así eludió la prohibición en la Carta Magna, de no aspirar a cargos públicos si tiene un grado segundo de afinidad con el mandatario.